Tener un negocio propio siempre es todo un reto. Para que este sea exitoso requiere de esfuerzo dedicación, y, sobre todo, de mucha constancia. En el caso de trabajar con metales pasa igual, de hecho, cuando montas tu propio taller, seguramente debas hacer una inversión considerable al momento de comprar los equipos, pero está será bien recompensada si haces las cosas bien.
Teniendo lo anterior presente, hoy queremos darte algunos consejos para tu taller de herrería:
Maquinaria:
Si conoces de la materia, sabrás que requieres de equipos que son indispensables, como, por ejemplo, una máquina de soldar, que dependerá del tipo de soldadura que vayas a usar en un principio. También requerirás equipos para cortar metal, pueden ser esmeriles u otro tipo de herramientas. Compra equipos de calidad comprobada, recuerda que lo barato puede salir caro.
Espacio y ubicación:
Si estas comenzando y no tienes la capacidad monetaria para comprar un galpón gigante, quizás eso no sea necesario, sin embargo, si debes tener en cuenta que requieres de espacio para poder almacenar material y tu maquinaria, así que debe contar con el tamaño acorde. Por otro lado, la ubicación es indispensable, así que debes tratar de ubicar tu taller en un sitio de fácil acceso y que cuente con proveedores de materiales cercanos.
Contabilidad:
Controlar los ingresos y los egresos es muy importante en cualquier negocio, así que cuida hasta el más mínimo detalle en este punto. Es recomendable que contrates a una persona para que te ayude con ello y puedas mantener las cuentas al día.
Personal:
Si quieres incrementar el equipo de trabajo, ten en cuenta que la mano de obra bien calificada te permite poder sacar los proyectos adelante en un menor tiempo, aunque, mientras más experiencia, mayor costo, así que dependerá de ti encontrar a la persona adecuad de acuerdo al presupuesto.
Consumo energético:
Estos equipos consumen mucha energía eléctrica, por lo cual, contar con la instalación adecuada disminuirá el riesgo de accidentes y de fallas. Ten eso presente al buscar el lugar para tu taller.
Por José Manuel Mustafá